La espiga no es espiga hasta que transcurre la siembra, el riego, la fecundación, la maduración... y con el verano llega la recolección de la cosecha. ¡He aquí el vagido de Semilla! Del mismo modo la vida necesita su propia historia. Embarazo, gestación y nacimiento. Existencia, muerte y trascendencia (espiritual) ¡He aquí nuestro vagido!
Alma pura y clara engalanada en musicalidad, regala la más dulce melodía… Un musical de meditación y relajación profunda. Sabia Anciana, calmada, llena de pasión, paz y silencio. Protectora... Curandera... Sanadora...
Ha hecho lo que debía… pero dejó en el aire lo que quería una vez más. ¿Y por qué? Porque es madre y su obligación es cuidar de sus hijos. Sus valores y esencia se lo piden por encima de sus deseos. Siempre antepone el deber a sus gustos, siempre el trabajo a sus jovis.